#predicaciondominical
SANSÓN
Lectura: JUECES 21:25 "En aquellos días no había rey en Israel y cada cual hacía lo que bien le parecía".
Al inicio del libro de Jueces se recoge la pauta de comportamiento del pueblo de Israel a lo largo de los siglos, el pueblo peca alejándose de Dios y desobedeciendo sus instrucciones. Así podemos identificar un ciclo que se repite en forma de bucle en la historia de Israel. El pueblo se aleja de Dios y desobedece-peca. Llega la disciplina en forma de invasión y dominio por parte de otra nación. Al tiempo se produce arrepentimiento y clamor a Jehová. Dios escucha y provee un libertador a través del cual salvará al pueblo.
Es el momento que le toca vivir a Sansón para liberar al pueblo del poder filisteo. Su nacimiento es de carácter milagroso, ya que su madre era estéril. Habrán de darse unas condiciones para el cuidado del niño, ya que Dios lo aparta para sí a través del “voto del nazareato” (Números 6:1) mostrando de esta manera el privilegio de Sansón por su consagración que le permite una estrecha relación con Dios, así como el propósito de salvar al pueblo (Jueces13:5).
Recibe por parte del Espíritu de Dios una fuerza sobrenatural que le permitirá convertirse en un guerrero invencible.
Sansón, una vez superada su infancia, también hizo lo que bien le parecía. Se enamoró de una mujer filistea de Timnat y decide tomarla por esposa, aún a pesar de las recomendaciones de sus padres, que intuyen que el camino de su hijo se desvía de lo que Dios le ha marcado. De esta manera, se producen una serie de sucesos por los cuáles Sansón rompe en varios puntos su voto de nazareo. Pero, esto sólo es el síntoma de su auténtico pecado . . . no vivir en una estrecha relación con Dios.
Atraviesa los viñedos de Timnat, cuando no debía acercarse para nada al fruto de la vid y poder preservarse como nazareo. Atacado por un león, Dios le salva, con esa fuerza sobrenatural con la que le capacita el Espíritu de Santo, aunque Sansón no ha sido sensible al actuar de Dios para recordarle su identidad y propósito . Al tiempo regresa para comprobar el estado del león, rompiendo en otro punto (no tocar cadáver) el voto de nazareo.
Capítulo 15. Se genera una situación de violencia brutal entre Sansón y los filisteos, ya que han “regalado” su esposa a otro hombre. Sansón obedece a su sentimiento de venganza, y ciertamente causa un gran daño y mortandad en el pueblo filisteo, pero, todo obedeciendo a sus deseos y no a la voluntada de Dios. Hacía “lo que bien le parecía”. En el penúltimo episodio de la vida de Sansón, lo vemos rindiéndose a los encantos de otra mujer filistea, Dalila, al punto que le revela el secreto de su fuerza sobrenatural. Cortar su larga melena le privaría de la sobrenatural fuerza que le caracterizaba y que tanto atemorizaba a los filisteos. Dalila le traiciona haciendo que le corten el cabello mientras duerme confiado en su regazo.
Con el pelo rapado los filisteos capturan al hombre sin problema alguna. La última condición que le mantenía como nazareo había sido rota. Le sacan los ojos y lo encarcelan.
En una gran fiesta de los filisteos para honrar a su Dios Dagón hacen escarnio de Sansón. Pero, su pelo ha vuelto a crecer. Ora a Dios (la segunda vez que lo hace en toda la historia que nos narra la Bíblia) para poder ser investido una vez más por la fenomenal fuerza que le acompañó de por vida, y apoyándose sobre las columnas centrales del templo de Dagón lo derribando matando a más filisteos de lo que había hecho en toda su vida.
CONCLUSIÓN : Dios ha pagado un alto precio por mí con el sacrificio de Jesús en la cruz. Esto me confiere una nueva identidad, soy hijo de Dios. Y como los nazareos mi vida está “apartada” para Dios, ya mis pasos se van a conducir siendo guiados por Dios. Por otro lado, tengo un propósito que es mostrar a otros a Cristo a través de mi vida presentándoles el mensaje de salvación.
Como hijos de Dios con una misión no podemos conformarnos a hacer “lo que bien nos apetece”.
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